Para los nuevos empleados de una empresa es esencial que exista un proceso de onboarding adecuado durante los primeros días. Suelen ser momentos de cierto nerviosismo en los que surgen preguntas como, por ejemplo, qué tareas se van a realizar, quienes serán sus compañeros, quién podrá resolver sus dudas, etc.  Responder a estas preguntas como organización en esta primera toma de contacto causa una buena impresión y favorece la retención del talento.   

¿Qué es el proceso de onboarding?

El proceso de onboarding o plan de acogida es el conjunto de acciones orientadas a facilitar las incorporaciones de los nuevos trabajadores a la empresa. Son más que un simple manual ya que tienen como objetivo principal ayudarles a adaptarse a este nuevo entorno de una forma positiva y cómoda.   

Proporcionar una correcta bienvenida permite que los nuevos empleados comprendan el funcionamiento del negocio, conozcan al equipo y su puesto de trabajo. El concepto de onboarding hace tiempo que existe, sin embargo, es ahora cuando está ganando visibilidad y relevancia. 

Beneficios del proceso de onboarding

Si eres de los que se preguntan ¿para qué sirve el onboarding? A continuación, compartimos contigo los beneficios que puede aportar a tu empresa un plan de acogida: 

• Reduce el período de adaptación de los nuevos trabajadores: el proceso de onboarding favorece que el nuevo empleado conozca desde un principio los reglamentos, la cultura y el objetivo de la empresa. Sobre todo si está acompañado por un miembro del equipo que le guíe y ayude durante sus primeros pasos en la nueva compañía.  
• Mayor sentimiento de pertenencia: sentirse cómodo desde el primer día marca la diferencia entre una empresa u otra. Si los nuevos trabajadores experimentan esta sensación, generarán un mayor sentido de pertenencia hacia la empresa, mejorando, a su vez, el employee engagement.  
• Reduce los costes de rotación y aumenta la fidelización del talento: si se logra mantener el talento, la empresa tendrá un menor coste económico al no tener que realizar otro proceso de selección para contratar otro trabajador. Así, si en el entorno laboral es motivador y los empleados están a gusto, no tendrán ninguna necesidad de buscar otro trabajo.  
• Aumenta la eficiencia y la productividad: al recibir orientación del onboarding desde un inicio, el rendimiento de los empleados será más alto. Se sentirán más seguros y tendrán sus objetivos más claros.  

¿Cómo crear un plan de acogida correctamente?   

Ahora que ya sabes qué es y cuáles son sus beneficios, ¿qué pasos hay que seguir para elaborar un proceso de onboarding? No existe ninguna fórmula mágica, pero te compartimos algunos consejos que seguro te ayudarán a implementarlo en tu organización: 

• Analiza tu empresa: para poder transmitir a los nuevos empleados los reglamentos, la cultura y los objetivos de la empresa, primero deberás realizar un análisis interno para poder recoger aquella información relevante que le quieras transmitir. 
• Pre-onboarding: esta etapa comprende el período desde que se selecciona al candidato o candidata hasta que se le contrata. Tramita la documentación necesaria de forma ágil e infórmale de su categoría profesional, funciones y jornada.
•   Gestiona los primeros días: en su primer día lo más importante es organizarle una bienvenida para que se sienta cómodo y bien recibido en su nuevo empleo. Muéstrale los espacios de la empresa y preséntalo a los demás empleados. Seguidamente, deberás introducirle todos los elementos y herramientas que utilizará en su puesto de trabajo: desde equipos y herramientas de trabajo hasta sus credenciales de acceso. 
• Realiza un seguimiento: después de los primeros días, es importante realizar un seguimiento semanal para detectar aquellos puntos que necesitan más atención y apoyo. Otro factor relevante es valorar cómo se siente a lo largo del proceso. Esta tarea resultará más efectiva si se le asigna un mentor o mentora que le acompañe a lo largo del proceso. 
• Finaliza el onboarding: daremos por acabada esta etapa una vez el empleado esté adaptado por completo. Aun así, es conveniente que evalúes su experiencia ya que de esta forma podrás sacar los puntos fuertes y los puntos de mejora de tu plan de acogida.   

Ya has visto que, para incorporar de forma adecuada a un nuevo profesional a tu empresa, no es necesario invertir miles de euros, simplemente elaborar un buen plan de onboarding que beneficie tanto a los empleados como a la compañía.   

¡Ahora es tu turno! Si tienes pensado incorporar a un nuevo miembro en tu equipo, pon en práctica los consejos que te hemos dado y prepara tu propio proceso de acogida. ¿Ya tienes tu propio plan diseñado? ¡Te leemos en los comentarios!